Tu mascota es el compañero ideal para hacer ejercicio y para pasar tiempo de calidad juntos. Existe una gran variedad de ejercicios y rutinas que puedes practicar con ella tanto en el interior de tu casa como en el exterior. En ambos casos, se pueden obtener muchos beneficios de salud, así como estímulos mentales positivos y una gran conexión entre ambos.
En interiores, puedes enseñar a tu mascota a utilizar tu máquina caminadora cardiovascular, en caso de que tengas una, o bien hacer sentadillas, abdominales y otras rutinas que puedes seguir en videos, tal como la cada vez más popular “doga”, que no es más que la unión de las palabras “dog” y “yoga”. La doga es una variación del yoga, diseñada para que las mascotas lo puedan practicar con sus dueños.
Si el lugar donde habitas cuenta con escaleras, puedes subirlas y bajarlas varias veces. También puedes convertir la rutina de ejercicios en algo divertido al bailar o jugar a tirar de la cuerda, o a lanzar y esconder juguetes. En exteriores, las opciones para realizar ejercicio son muchas. En un espacio amplio y abierto, puedes lanzar una pelota o el frisbee, o bien, jugar fútbol. Juntos pueden saltar o esquivar obstáculos o simplemente caminar con paso firme, trotar, correr o practicar senderismo. Si te gusta patinar o el ciclismo, tu perro puede seguirte,
o incluso nadar contigo.
Sin importar el tipo de ejercicio que practiquen en conjunto, siempre toma en cuenta su raza, edad, peso y tamaño, ya que las necesidades de ejercicio físico pueden variar. Los cachorros, por ejemplo, siempre estarán llenos de energía, pero hay que tener cuidado con su estructura ósea, pues aún son frágiles y podrían lastimarse.
Así mismo, no debemos abusar del ejercicio ejecutado por animales con sobrepeso u obesidad. Por ello, consulta con el médico veterinario y haz una revisión periódica para asegurarte de que no lo estás forzando de acuerdo a su condición y características y para que te indique cuál es el tipo y frecuencia de ejercicio adecuado.
Tú conoces bien a tu mascota y sabrás identificar cuando se cansa. No olvides ofrecerle descanso, agua fresca y un alimento saludable balanceado de calidad Premium o Super Premium para fortalecer su condición física.
Es recomendable ejercitarse en horas frescas del día, ya sea en la mañana o al atardecer. También calentar al iniciar la rutina, bajar el ritmo en determinados momentos y, sobre todo, no perder de vista ni descuidar a tu mascota. Asegúrate que siempre porte su placa de identificación y si es posible, utiliza una correa correctamente ajustada.
Haz contacto visual, y enséñale comandos básicos para que se mantenga a tu lado y para que sepa interactuar con otros perros y personas que pudieran encontrar en el camino. Siempre protege y revisa sus almohadillas atento a lesiones que pudiera llegar a tener.
Tanto personas como mascotas necesitan ejercitarse y mantenerse activos para evitar el estrés, ansiedad y depresión, y qué mejor que hacerlo acompañados de nuestros mejores amigos. Al practicar ejercicio habitualmente, ambos se relajarán y obtendrán beneficios tanto físicos como psicológicos; prevendrán la obesidad, tonificarán sus músculos, fortalecerán sus articulaciones y elevarán su resistencia cardiovascular. Una mascota sana es una mascota feliz
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